lunes, 9 de febrero de 2009

Phalaenopsis Mini Mark

Esta vez os traigo la floración de esta bonita orquídea. Se trata de una Phalaenopsis Mini Mark. Muchos piensan que es una phalaenopsis botánica, pero en realidad resulta ser una phalaenopsis híbrida, resultante de un cruce entre una Phalaenopsis Micro Nova (P. maculata x P. parishii) y entre una Phalaenopsis philippenense.

Es una phalaenopsis de talla pequeña, de flores muy bonitas y de fácil cultivo. Adquirí esta preciosidad en la exposición de orquídeas que se hizo en Bordeaux (Francia) en octubre del año 2007. Se la compré a Nardotto e Capello, vendedores/productores italianos, que tienen unas orquídeas grandes, fuertes y sanas. Nada más verla en el stand me quedé fascinado por su flor. Además traía una vara en flor y otra vara que venía en curso.

Después de disfrutar de su floración durante varios meses y cuando llegaron los meses calurosos, la saqué al exterior, junto a las demás orquídeas. Mientras que la mayoría de las demás, las dejo expuestas a las inclemencias del tiempo, las phalaenopsis las meto en un invernadero pequeñito de esos de tres baldas, pues como vivo en una zona muy lluviosa, así controlo mejor sus riegos.

A finales de verano, al ir introduciendo las orquídeas al interior de nuevo, mi Phalaenopsis Mini Mark la monté en corcho, pues desde que la adquirí estaba en maceta. Cuál sería mi sorpresa cuando al ir a montarla me di cuenta de su incipiente vara. Era diminuta, pero ya se notaba que no era raíz sino vara… Así y todo, he tenido que esperar cinco meses para disfrutar de su floración, pero ha merecido la pena.

En cuanto a las condiciones de cultivo que le doy son las siguientes: Es una orquídea a la que no le dejo que le baje la temperatura de 15ºC (alguna vez que otra baja más, pero dejo el sustrato bien seco). Durante el verano, tiene una temperatura entre 20/25ºC, teniendo picos de 30ºC algunas veces, que aguanta si se le suministra un extra de humedad ambiental. Al estar montada en corcho los riegos son más frecuentes que al estar en maceta. En general, las raíces de las phalaenopsis deben estar secas antes de volver a regarlas. Esto se controla mucho mejor cuando están montadas y es más difícil llegar a la pudrición de las raíces por riegos excesivos.

En invierno tengo casi todas mis orquídeas en mi buhardilla-orquideario; allí la temperatura no desciende de los 15º, con una humedad ambiental entre un 60 y un 70º%. En esta estación, la riego cada dos o tres días. En cada riego añado siempre un poco de abono (con dosis muy bajas al ser los riegos continuos), en mi caso suelo alternar con un abono de floración –rico en potasio- (10-30-20), un abono de crecimiento –rico en nitrógeno- (30-10-10) y un abono balanceado (20-20-20). También añado con todos los riegos, unas gotitas de superthrive al agua de riego. La tengo ubicada en un sitio donde recibe luz, pero no sol directo, aunque no me preocupa que le toquen los rayos solares invernales, en mi zona, no calientan mucho, y no tengo peligro de tener quemaduras en las hojas .

En verano, la ubico en un sitio resguardado de los rayos directos del sol. Los riegos son diarios. Con las temperaturas que hace en verano, el agua se evapora enseguida y prácticamente el musgo está ya seco por la tarde. Tengo mucho ojo en aplicar venero para caracoles, babosas… pues si no, enseguida atacan las hojas, raíces y varas incipientes. Con aplicarlo, en mi caso cada 15 días, es suficiente.

Espero que os guste

martes, 3 de febrero de 2009

Paphiopedilum híbrido

Esta vez le toca el turno a este paphiopedilum. Lleva conmigo en casa desde el 25 de Julio del 2007. La adquirí en un centro de jardinería francés, Jardinerie du Golf, en Bassussarry. No me había florecido de nuevo hasta ahora, pues los brotes nuevos que traía eran bastante pequeños, pero en este año y medio les ha dado tiempo para crecer y darme una bonita flor. Traía dos brotes nuevos, pero al ir a transplantarlo a un sustrato mejor, uno de los brotes se me soltó, así que lo puse en una maceta nueva y luego se la regalé a mi buen amigo Patrick de Barcelona, del foro de orquídeas de Infojardín. Espero que a él también le florezca, aunque sea el año que viene.

El sustrato que preparo para este paphiopedilum, y para casi todos los paphios que tengo consta de los siguientes materiales:

40% Corteza de pino de granulometría mediana (1 a 1’5 cm)
20% Corteza
de pino de granulometría pequeña (0’5 a 1cm)
10% Estiércol descompuesto de caballo
10% Tierra volcánica (1 a 1’5 cm)

10% Carbón vegetal (1 a 1’5 cm)
10% Gravilla mármol (1 a 1’5 cm)

Llevo años utilizando este preparado, y con buenos resultados, así que, mientras no encuentre uno mejor, sigo con ello. Aunque no todos los paphios necesitan los mismos sustratos, para más información podéis leer un artículo muy bueno que escribió Paphiopere hablando sobre las distintas mezclas de sustrato que necesitan para según qué paphiopedilum.

Los paphiopedilums, al igual que muchas orquídeas, necesitan mucha humedad y riegos frecuentes. El sustrato tiene que permanecer mojado, eso no quiere decir que esté encharcado. Es por eso la importancia de utilizar un medio en el que el agua drene bien, pero a su vez retenga la humedad. Son plantas que no requieren de mucha luz, y menos los rayos de sol directo, así que se pueden ubicarlas en un lugar donde no les dé el sol, bien en algún lugar de sombra del jardín, o bien en un lugar de la casa sin que les incidan los rayos del sol. Si se los mantiene en el exterior, hay que tener mucho cuidado con los caracoles y babosas. Les encantan sus hojas, y qué decir de los brotes nuevos. No vendría nada mal, echar un veneno contra ellas cada 15 días...

En cuanto a las condiciones de culivo que les doy yo a mis paphios: En los meses más calurosos del año, saco a mis paphiopedilums, al igual que muchas de mis orquídeas, al exterior. Todos mis paphiopedilums, los coloco, a nivel del suelo, sobre unas macetas con grava volcánica, en un lugar donde durante todo el verano no les incidan los rayos solares. Al estar a este nivel, están expuestas mucho más fácil, a los ataques de los caracoles, babosas, gusanos, etc... por lo que hay que estar con ojo, aplicando venenos periódicamente. Hay que andar con mucho ojo con los riegos. En verano,
con las altas temperaturas, el agua del sustrato se evapora fácilmente, así que diariamente hay que regarlos. Yo tengo la suerte de vivir en una zona lluviosa, y muchas veces no me hace falta ni sacar la manguera...

Una vez de que las temperaturas nocturnas empiecen a bajar de los 5ºC, meto todas las orquídeas, al igual que los paphiopedilums, al interior, y pasan allí el resto de los meses (los más fríos) a una temperatura constante de unos 20ºC, con una humedad de entre el 55 y 60%, y muy de vez en cuando, expuestas a los rayos solares invernales. Si se tiene un mejor clima que el mío, incluso se pueden dejar en el exterior durante todo el año. Mi amigo Álex -del foro de orquídeas de Infojardín-, que vive en un lugar de clima mediterráneo, deja sus paphiopedilums en el exterior durante todo el año, aguantando temperaturas de incluso 3ºC.

Próxima floración, Phalaenopsis Mini Mark